Lunes, 6 de Mayo de 2024

Al menos 120 nuevos despidos en el Posadas. Militarización y piñas

Serían en total 120 trabajadores de todas las áreas del Hospital Posadas. Desde Cicop, gremio de profesionales de la Salud, sostienen que tienen la intención de disciplinar a quienes se opusieron a las reformas de flexibilizadoras. Decenas de efectivos de la Policía federal fueron parapetados con cascos y escudos impidiendo que los despedidos llegaran a las altas esferas de la administración del hospital. También hubo gresca cuando se enfrentaron despedidos y la cúpula de ATE Morón.

17-01-2018



No es la primera vez que el Hospital Posadas debe enfrentar jornadas como la de ayer. Lo mismo ocurrió durante días a poco de haber asumido el gobierno Mauricio Macri. La excusa para despedir cientos de trabajadores en ese momento fue que en teoría, habían sido nombrados poco antes de retirarse la anterior gestión, como lo cual los señalaban como "puestos políticos".

Sin embargo, dos años después la historia se repite y las escenas de llantos, gritos y policías por doquier, también.

Para poder ingresar, los empleados del hospital debían notificarse y chequear si sus nombres se encontraban en las listas, que en este caso no eran "negras", sino "blancas". Si el nombre estaba allí escrito, continuaba siendo empleado, si no, acababa de enterarse que se quedaba sin trabajo.

La lista negra, la de los despedidos, en su gran mayoría eran trabajadores que estaban con "contrato Posadas", como le llaman allí a quienes venían siendo empleados desde hace años y se habían negado a pasar al tipo "contrato 48ª" que es el "vigente", y que deja en el camino reconocimiento de los años trabajados y flexibiliza las condiciones.

Algunos aducen además, que se despidieron personas que no contaban con secundario aprobado, y otros remarcan en cambio, la coincidencia del pensamiento político contrario al oficialismo de la mayoría de las bajas que se dieron principalmente en el área de enfermería.

La realidad es que se trata de otro ajuste sobre el hospital de la zona oeste del conurbano bonaerense, pero según los profesionales de la salud el motivo no es sólo ese, sino también "disciplinarlos".

En este sentido, el titular de la Federación Sindical de Profesionales de la Salud (Fesprosa), Jorge Yabkowski, aseveró que "la medida es una represalia contra la Cicop (gremio bonaerense de la Federación) y los enfermeros que se opusieron a la flexibilización laboral en ese Hospital".

"Ayer declaramos el estado de asamblea permanente y en estos momentos los compañeros se están reuniendo en asamblea para definir los pasos a seguir", confió el también referente de la CTA Autónoma.

En la nueva tanda de despedidos hay empleados con más 25 años de servicio en el Posadas, por lo que la situación es sumamente angustiante.

En noviembre la Justicia había fallado a favor de los enfermeros "y contra las medidas tomadas por las autoridades, ordenando que devuelvan a los trabajadores los salarios descontados por medidas gremiales que tomaron al no ser oídos en su negativa a ampliar de 10 a 12 horas por la noche su jornada laboral".

Al igual que lo sucedido en los ministerios donde despidieron trabajadores, el hospital estuvo además, casi militarizado. Cientos de efectivos de la Policía Federal ingresaron al nosocomio con cascos, palos y escudos como si se tratara de la primera fila de Infantería que iría al choque.

La Dirección Ejecutiva del hospital, a cargo del médico Pablo Bertoldi Hepburn, no informó de manera individual sino que publicó una resolución con los nombres de los que sí renovarían su contrato. Los que no estuviesen allí, debían darse por despedidos. Para amedrentar a los empleados, las oficinas de la Dirección del hospital estuvieron todo el día estaban colmadas de policías que impedían el pedido de explicaciones a las autoridades.

Además, la guardia de Infantería desplegó un cinematográfico operativo con decenas de efectivos que se paseaban armados por los pasillos del Hospital Público, que cabe recordar, es uno de los pocos bajo la órbita nacional. El otro es el Garrahan que comparten Nación y Ciudad.

No obstante, los incidentes no se circunscribieron a la zona del hospital. Un grupo de despedidos fueron a pedirle explicaciones al titular de ATE Morón, Daría Silva, y le reclamaron que realice una asamblea. El gremialista le contestó a las piñas con un núcleo de su entorno.

Dario Silva, el secretario General de ATE Morón fue denunciado por responder a golpes de puños, con un conjunto de gente de su entorno, a los propios despedidos.

La situación se generó cuando un grupo de los empleados que se habían enterado de sus cesantías lo fueron a buscar. Concretamente lo señalan por haber tenido algún grado de participación en la decisión de los despidos y le pedían que realice una asamblea para que los afiliados definan los pasos a seguir.

Lejos de atender a los reclamos, Silva salió a cruzarlos a golpes de puño y, con gente de su entorno, (muchos de ellos con antecedentes penales, según contaron los propios atacados) le pegó a los afiliados que lo cuestionaban.

Silva quedó en el ojo de la tormenta además por haberse mostrado sonriente junto a Ramiro Tagliaferro, el intendente de Morón, perteneciente a la gestión de Cambiemos y ex esposo de María Eugenia Vidal. Si bien la administración del hospital es nacional, la ubicación del nosocomio en el distrito de Morón hizo que existiese siempre un estrecho vínculo entre las autoridades municipales y las del Posadas, por lo que la foto entre sindicalista y Jefe comunal en medio de los despidos, generó la reacción de los trabajadores.



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